Cartas a Julieta, un proyecto del Club Atalaya

Este curso, los alumnos de 3º de ESO del Colegio Atalaya han llevado a cabo un emotivo e inspirador proyecto basado en la tradición del Club di Giulietta en Verona. Con la ilusión de dar voz a sus sentimientos y reflexiones sobre el amor, crearon su propio Club del Colegio Atalaya, en el que participaron activamente tanto redactando cartas como promoviendo la iniciativa en todo el centro.

El proyecto tuvo un enfoque interdisciplinar. Desde el departamento de Lengua, los alumnos aprendieron a redactar correctamente una carta. Aquí comprendieron la importancia de estructurar sus ideas con claridad, cuidar la ortografía y adaptar el tono según el propósito comunicativo. Saber escribir una carta sigue siendo una habilidad esencial en la actualidad. Dicha habilidad permite expresar sentimientos, solicitar información o comunicar mensajes de manera efectiva y personal.

Para animar a más estudiantes a participar, diseñaron carteles informativos que incluían un código QR con la historia de Shakespeare. Esta había sido leída en la clase de lectura de Lengua, de modo que cualquier persona pudiera leerla.

En colaboración con el departamento de Arte, también crearon buzones decorados donde los alumnos podían depositar sus escritos. Esto proporcionó un espacio simbólico de expresión. La iniciativa se extendió rápidamente por el centro, y alumnos de 1º y 2º de ESO también se sumaron al envío de cartas, enriqueciendo aún más el proyecto.

Pero la magia del proyecto no terminó ahí. La profesora de Lengua, en un viaje a Verona con el curso de bachillerato, llevó consigo todas las cartas y las depositó en el buzón de Julieta, conectando así de manera simbólica y real el esfuerzo de los estudiantes con la tradición que ha inspirado, durante décadas, a personas de todo el mundo.

Ahora, todos los participantes esperan con ahínco la respuesta a sus cartas. Los alumnos están llenos de ilusión y curiosidad por conocer la contestación del Club di Giulietta. Este proyecto ha sido una experiencia enriquecedora que ha combinado la literatura, la creatividad y la emoción, permitiendo a los alumnos vivir la escritura desde una perspectiva cercana y significativa. Sin duda, una iniciativa que ha dejado huella en el Colegio Atalaya.